Continuamente hacemos el seguimiento de nuestros olivares cuidando la cubierta vegetal que proporcionará una tierra más oxigenada y esponjosa, que proveerá de materia orgánica al suelo y que tan importante es para la fauna. Y cuando hablamos de fauna, nos referimos tanto a la exterior como a la interior, ya que en muchas ocasiones nos olvidamos de esa multitud de microorganismos que tan gran trabajo hacen en nuestro suelo. Son ellos los que, entre otras cosas, ayudan al árbol a asimilar los nutrientes existentes o aportados; son reguladores de todos esos nutrientes que en muchas ocasiones la planta no puede digerir de inmediato. La fauna externa también se beneficia de las bondades de la cubierta herbácea, sirviendo de aporte en la alimentación de toda la pirámide animal existente: la flor alimenta a los insectos, los insectos a las aves insectívoras, estas aves alimentan a las rapaces y otros depredadores, etc. No olvidemos que en la naturaleza todo es equilibrio…si no se rompe.